El mundo se comprometió a erradicar el sida para 2030.
Estamos lejos de cumplir esa meta.
Para acabar con el sida, debemos poner fin a las desigualdades que nos impiden progresar.
Corremos el riesgo de que más millones de personas contraigan la enfermedad y mueran.
Este Da Mundial del Sida, clamamos al unísono:
¡Igualdad ya!
El eslogan "¡Igualdad ya!" es un llamamiento a la acción.
A que se tomen medidas prácticas que hayan resultado valiosas para acabar con el sida.
Hay que ampliar el acceso a servicios más apropiados y de mejor calidad para tratar, detectar y prevenir el VIH.
Por tanto, hacen falta más recursos financieros.
Mejores leyes, políticas y prácticas para eliminar el estigma y la exclusión que sufren las personas que viven con el VIH, sobre todo las poblaciones marginadas.
Todas las personas merecen respeto y sentirse incluidas.
También hay que promover el intercambio de tecnología para que todas las personas tengan acceso a los mejores conocimientos científicos sobre el VIH, especialmente entre los países del Sur y del Norte.
Es posible y es nuestro deber eliminar las desigualdades que perpetúan la pandemia de sida.
Podemos acabar con el sida.
Pero antes debemos hacer realidad el eslogan ¡Igualdad ya!.