ONU Bolivia apoyó a más de 600 familias afectadas por incendios forestales en San Matías
La misión de Naciones Unidas recorrió ocho comunidades del municipio de San Matías para distribuir artículos de primera necesidad.
Ante la situación de emergencia por los incendios forestales que impactan a varias regiones de Bolivia, el Sistema de Naciones Unidas ha desplegado una misión humanitaria en el municipio de San Matías, en el Departamento de Santa Cruz, con el fin de apoyar a las comunidades afectadas. Esta intervención, liderada por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), responde a una acción coordinada para atender las necesidades de asistencia urgente de las familias que atraviesan esta crisis.
San Matías, a más de 800 kilómetros de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, ha sido uno de los municipios más afectados por los incendios forestales. Se estima que alrededor del 47% de su territorio fue devastado por el fuego. Las llamas persistieron cerca de dos meses y la sequedad de la vegetación y los vientos huracanados expandieron el fuego al menos 35 km en casi de 24 horas, según cuenta el alcalde Carlos Velarde Villarroel. “El presupuesto asignado a emergencia fue superado, nos valimos de la ayuda de la gente de las mismas comunidades que en su desesperación empezaron a organizarse para apagar el fuego, pero no ha sido suficiente”, afirma Velarde, a tiempo de señalar que El Tornito, Natividad, San Fernando y Carmen de Limones fueron las comunidades más afectadas.
Vicente Suarez, Cacique de la comunidad El Tornito, cuenta que tres casas se quemaron en el lugar y lo perdieron todo. “Todo ocurrió muy rápido. Cuando nos dimos cuenta del fuego, no teníamos luz, ni comunicación para pedir ayuda, ni agua. Esas familias no tenían ni qué comer después de perderlo todo. Hicimos colecta para ayudar a esas familias, todo lo que teníamos. No hubo incendio como este”.
La misión de Naciones Unidas en este municipio recorrió ocho comunidades, entre ellas El Tornito, para distribuir artículos de primera necesidad, como agua potable y kits de higiene y alimentos. ACNUR viabilizó la entrega de 1,000 litros de agua potable y 500 kits individuales de higiene, mientras que UNICEF proporcionó 278 kits de higiene familiar, junto con purificadores de agua y mochilas escolares para apoyar la continuidad educativa en el contexto de la emergencia. La OIM, por su parte, distribuyó 50 kits de alimentos y 50 kits de higiene familiar. En conjunto, estas acciones beneficiaron a 634 familias en las zonas más afectadas.
“En situaciones de emergencia caracterizadas por profundas necesidades humanitarias, los artículos de primera necesidad representan un componente esencial para el bienestar de las poblaciones afectadas, al contribuir a la mitigación del sufrimiento y a la salvaguarda de la dignidad humana”, afirma Jessica Llorenti, Oficial Asistente de Terreno de ACNUR. Por su parte, Alejandro Luján, Oficial de Emergencias de UNICEF, hace hincapié en lo fundamental de dar apoyo a las familias “buscando asegurar su acceso a recursos básicos y respaldando la educación de niñas, niños y adolescentes en un momento de gran necesidad”.
El equipo de las Naciones Unidas desarrolló esta misión en coordinación con las autoridades locales para facilitar el acceso a las comunidades y asegurar la entrega de insumos. Richard Arana, responsable de Operaciones y Emergencias de la OIM, afirma que “las condiciones de accesibilidad no permitieron que anteriormente la asistencia humanitaria llegue a las familias afectadas. Esta acción responde a las necesidades identificadas en la evaluación del Equipo Humanitario País, con enfoque centrado en el derecho a la asistencia humanitaria y protección”.
Esta intervención se enmarca en una respuesta interagencial de Naciones Unidas en Bolivia. El Gobierno Autónomo Municipal de San Matías supervisó el uso adecuado de estos suministros, según el acta de entrega de esta ayuda.
Además del apoyo inmediato, la misión es parte de un esfuerzo más amplio para fortalecer la resiliencia de las familias afectadas y establecer las bases para una recuperación sostenible. En el marco de esta emergencia ambiental sin precedentes, el Sistema de Naciones Unidas reafirma su compromiso de colaborar con el Estado boliviano y de coordinar esfuerzos humanitarios que permitan una respuesta eficiente y una recuperación a largo plazo para las familias y comunidades en mayor situación de vulnerabilidad.