La capa de ozono: ¿Cómo proteger el escudo de la tierra?
Una conversación con Diego Alvarez, Coordinador del Programa País de ONUDI en Bolivia
La capa de ozono es como la barrera invisible que nos cuida de los rayos más fuertes del sol, es un escudo de la Tierra. Sin ella, estaríamos en serios problemas de salud, y la vida en la Tierra tal como la conocemos se vería amenazada.
En el marco del Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono, Diego Álvarez, Coordinador del Programa País de la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (ONUDI) en Bolivia, comparte una reflexión sobre por qué es tan crucial protegerla, cómo nuestras acciones del día a día pueden dañarla sin que nos demos cuenta y cómo podemos actuar para mantener este escudo vital en su mejor estado.
¿Qué es la capa de ozono y por qué es tan importante para la vida en la Tierra?
La capa de ozono es una franja de la atmósfera terrestre ubicada entre 15 y 35 kilómetros sobre la superficie, compuesta por moléculas de ozono. Su función principal es actuar como un escudo natural que absorbe la mayor parte de la radiación ultravioleta (UV) que emite el sol, en particular los dañinos rayos UV-B. Sin esta protección, los seres vivos estaríamos expuestos a niveles peligrosos de radiación, lo que podría provocar efectos graves en la salud, como un aumento de casos de cáncer de piel, daños oculares como cataratas y debilitamiento del sistema inmunológico. Además, la radiación UV en exceso podría alterar profundamente los ecosistemas, afectando la vida vegetal y animal, y reduciendo la capacidad de las plantas para realizar la fotosíntesis.
Para facilitar este concepto podemos imaginarnos la capa de ozono como un “parasol o paraguas” gigante que protege a la Tierra. Cuando se debilita, esa sombrilla se rompe, permitiendo que los rayos dañinos del sol lleguen con más fuerza a la superficie. Esto no solo afecta a las personas, sino también a los animales y plantas, alterando el equilibrio natural.
© NASA I
¿Cómo afecta el deterioro de la capa de ozono a nuestra salud y al medio ambiente?
La exposición de la Tierra a los rayos ultravioleta aumenta como resultado del deterioro de la capa de ozono, también conocido como "agujero de ozono". En términos de salud, esta mayor exposición aumenta significativamente el riesgo de desarrollar cáncer de piel, envejecimiento prematuro de la piel y problemas oculares graves como cataratas. Sin embargo, no solo los individuos sufren, sino que también los ecosistemas se ven afectados. Por ejemplo, la mayor exposición a los rayos UV daña los ecosistemas marinos, alterando la biodiversidad y disminuyendo la productividad de los océanos. En el ámbito terrestre, el deterioro de la capa de ozono puede tener un impacto negativo en el crecimiento de las plantas, lo que puede tener un impacto en la agricultura y la seguridad alimentaria.
¿Qué acciones comunes de la vida cotidiana dañan la capa de ozono sin que nos demos cuenta?
En nuestras actividades diarias, con frecuencia usamos productos que contienen sustancias que dañan la capa de ozono sin saberlo. Algunos productos químicos se usan en refrigeración, aire acondicionado, aerosoles y ciertos productos de limpieza industrial. A pesar de que muchos de estos químicos han sido gradualmente eliminados gracias a acuerdos internacionales como el Protocolo de Montreal, todavía están presentes en algunos productos en el mercado informal.
Por lo tanto, podemos dañar la capa de ozono sin darnos cuenta al usar productos en aerosol viejos que aún contengan estas sustancias, no dar mantenimiento adecuado a nuestros refrigeradores o aires acondicionados, lo que puede liberar gases dañinos, o usar productos de limpieza que contengan químicos peligrosos.
Una persona en su día a día puede contribuir a cuidar la capa de ozono evitando productos que contengan estos químicos dañinos (leyendo la etiqueta de cada producto en aerosol que compra, por ejemplo), manteniendo en buen estado aires acondicionados y refrigeradores para evitar fugas de gases nocivos, optando por comprar productos ecológicos etiquetados como "ozono-friendly", utilizando transporte público, bicicleta o caminar en lugar de usar vehículos motorizados. Además, es importante educar y sensibilizar a la comunidad sobre la importancia de estas acciones, medidas simples que ayudan a reducir el daño a la atmósfera y a proteger la capa de ozono.
© PNUMA I
¿Qué está haciendo ONUDI para abordar los problemas relacionados con la capa de ozono y promover su protección?
Sin el Protocolo de Montreal, que es uno de los acuerdos medioambientales de mayor éxito y que entró en vigor en 1989, nos habríamos enfrentado a una catástrofe sanitaria mundial y a impactos desastrosos en todo el ecosistema.
Como uno de los cuatro organismos de implementación del acuerdo, la ONUDI está a la vanguardia de la acción climática, transformando la industria hacia la sostenibilidad.
Las inversiones de las industrias en investigación han llevado al desarrollo de nuevas tecnologías respetuosas con el ozono. Estas han creado puestos de trabajo, impulsado la innovación, mejorado la seguridad alimentaria y abierto nuevos mercados. Esta transición muestra cómo la protección del medio ambiente y el crecimiento económico pueden ir de la mano.
Al convertir las líneas de producción industrial a opciones respetuosas con el clima, ya sea en los sectores de refrigeración y aire acondicionado, espuma, aerosol o disolventes, la ONUDI promueve soluciones innovadoras para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. El año pasado, los proyectos de la ONUDI, en el marco del Protocolo de Montreal, lograron reducir 41 millones de toneladas métricas de emisiones nocivas, lo que equivale a las emisiones de más de 9,2 millones de automóviles que circulan en un año.
Desde 2010, hemos apoyado a más de 96 países a través de proyectos del Fondo Multilateral del Protocolo de Montreal, incluida la ayuda a más de 400 empresas para convertir sus líneas de producción industrial a opciones respetuosas con el clima.
A través de diferentes programas, se han fortalecido las capacidades de funcionarias y funcionarios públicos para desarrollar, implementar y hacer cumplir las normativas. Además, se ha puesto mucho énfasis en la educación, trabajando con universidades y centros de estudios superiores para fortalecer los conocimientos de estudiantes y dotarles de tecnologías de última generación, asegurando que las nuevas generaciones de profesionales puedan aplicar soluciones sostenibles y respetuosas con el medio ambiente.
En Bolivia, las y los jóvenes técnicos están recibiendo capacitación para utilizar refrigerantes más seguros y eficientes gracias a estos esfuerzos. Esto no solo protege la capa de ozono, sino que también mejora la calidad de vida de las personas al reducir la exposición a productos químicos perjudiciales y aumentar la eficiencia energética de los sistemas de refrigeración.
Con medidas globales y locales, podemos enfrentar el desafío de proteger la capa de ozono y garantizar que continúe siendo un escudo vital para la vida en nuestro planeta.
Diego Alvarez, Coordinador del Programa País de la ONUDI en Bolivia